La boda es símbolo de la unión eterna de dos personas. Después de la boda, y siempre que se puede, se realiza una luna de miel (viaje). Vestido de novia, banquete, lista de bodas…y por fin, el viaje de novios. No debemos descuidar la posibilidad de realizar viajes de novios que atiendan a la filosofía de vida que tengan los novios, atendiendo al respeto y la difusión de ciertos valores como la ética, solidaridad, respeto del medio ambiente…
En lo referente al viaje de novios responsable, intenta hacer de este viaje un momento inolvidable y lleno de experiencias enriquecedoras tanto para la pareja como para la población local. Estos viajes tratan de minimizar los impactos negativos del turismo, potenciando el acompañamiento con guías locales, difundiendo y respetando la cultura y la gastronomía local, además del medio ambiente y de las personas. Intenta no alterar el medio que se visita, evita las grandes cadenas hoteleras y utiliza como proveedores a pequeños hoteles con encanto, a pequeños negocios locales. Sigue leyendo
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